Superar la DEPENDENCIA.
En las sesiones del programa de tratamiento trabajamos este tema en profundidad, con el objetivo de:
1. Tener mayor independencia y confianza en uno mismo, poder tomar decisiones de manera autónoma, expresar de manera honesta los propios sentimientos e ideas y reducir el miedo al rechazo.
2. Tener una comunicación saludable, honesta y abierta.
3. Identificar y obtener ayuda de otras personas que te apoyen en tu casa, en el trabajo y en otras situaciones.
4. Para evitar sentirte fuera o no integrado, aprender lo que te asemeja a los demás.
Construyendo una red de apoyo.
Cuando las personas abusan activamente del alcohol, otras drogas o tienen comportamientos adictivos, a menudo se aíslan. Revertir ese rasgo es una parte importante de la recuperación. La mayoría de las personas que logran la recuperación a largo plazo lo hacen con la ayuda de otras personas. En nuestro programa tenemos una comunidad de personas en recuperación que pueden potenciar el trabajo profesional de los terapeutas del equipo.
¿Qué tan independiente soy?
Nuestra cultura tiende a enseñarnos cosas poco realistas y poco saludables sobre este tema. A los varones puede que se les haya enseñado que deben poder manejar cualquier problema sin ayuda o apoyo emocional. A las mujeres se les puede haber enseñado que no es femenino ser fuerte y que deben depender de otros para que las cuiden. Estos mensajes son erróneos y contraproducentes. Los seres humanos somos interdependientes: todos necesitamos ser capaces de resolver nuestros propios problemas, pero también poder recibir ayuda cuando algo nos supera, como recuperarse de una adicción. Un tratamiento te ayudará a encontrar tu propio equilibrio entre la independencia y confiar en la ayuda de los demás.